Los aumentos desmedidos de los alimentos, el transporte y los servicios golpearon duro en el bolsillo de los comerciantes, y las ventas -en muchos comercios del país- se desplomaron como nunca en los primeros meses del año.
La caída es tan grande que la dueña de un local de ropa del barrio porteño de Caballito llegó a reconocer que hubo días que no llegaron a abrir la caja. «Hay días que solo tenemos dos o tres ventas», reconoció Andrea en una entrevista con el canal de noticias TN.
«Es un local que tiene 45 años. Tengo buenas marcas y aunque no están tan caros tampoco se vende. Bajo alrededor de un 50% la venta del año pasado a ahora», explicó la comerciante y graficó: «Hasta hemos llegado a no abrir caja, que desde la época del 2001 que no pasaba».
La movilera de TN también sumó un dato sobre la caída de las ventas: «Mirá, te paso un dato. Nosotros estamos aquí hace varias horas. Algunos comercios empezaron a cerrar sus puertas porque está llegando la noche. Son comercios que cerraron sus puertas, y en las horas que estuvimos acá trabajando no vimos entrar ni a una sola persona a comprar».