La ceremonia se inició con el relevo en los puestos de guardia, a cargo de soldados del Ejército Argentino que visten el uniforme histórico del Regimiento 10 de montaña «General Racedo», quienes agregaron el barbijo a su vestimenta original.
«Es un momento muy emotivo en lo personal ya que pasé toda mi vida dibujando la Casa de Tucumán y por fin pude conocerla personalmente», destacó Mónica, una de las turistas oriunda de Buenos Aires que disfrutó del espectáculo.
La jefa de relaciones instituciones del museo, Vilma Tucunoc, destacó que el espectáculo es el mismo que se ofrecía antes de la pandemia, pero que ahora no podrá concentrarse un gran número de visitantes ya que los cupos se limitan a 20 personas por turno.
«Todo es gratuito y se desarrolla en un patio del interior de la Casa a cielo abierto», explicó la anfitriona, quien destacó que para ingresar hay que sacar los turnos en la página oficial del ministerio de Cultura o a través de la cuenta en la red social Facebook del museo.











